Laura Días y Miguel Ángel Maroto- Las 6 claves de la estimulación cognitiva.

 

Si tienes un familiar con deterioro cognitivo, te resultará conocido este concepto: estimulación cognitiva.

¿Sabes en qué consiste y por qué es tan beneficioso para los pacientes? Vamos a aprender más:

  1. En palabras sencillas, ¿qué es la cognición?

Es la capacidad de una persona para desenvolverse en la vida satisfactoriamente y sin dificultad, es decir:

  • Saber resolver de forma correcta los problemas y situaciones que se presentan a diario.
  • Conseguir objetivos personales.
  • Aprender, y no sólo en el sentido de estudiar, sino en el de adquirir “sabiduría” y conocimientos en el día a día. Y, después, recuperar esos conocimientos para poder usarlos.

 

 

  1. ¿Qué es el deterioro cognitivo y qué tiene que ver con la edad?

El envejecimiento conlleva un decaimiento gradual de las capacidades físicas y mentales. La evidencia científica afirma que los procesos de nuestro cerebro se vuelven menos eficientes en las personas mayores pero, ¿cuál es el motivo para que eso ocurra?

  • Aunque la experiencia con los años es mayor, nuestro cerebro procesa la información más lentamente.
  • Además, la memoria también se puede ver afectada con la edad.

Como consecuencia, algunos adultos mayores sufren diferentes patologías que se asocian al término ‘deterioro cognitivo’.

 

  1. ¿Es cierto que hay más deterioro cognitivo que nunca?

El aumento de la prevalencia (frecuencia) del deterioro se relaciona con el envejecimiento progresivo de la población. A más personas mayores, mayor cantidad de pacientes que lo sufren.

Esto ha fomentado desde hace años la búsqueda y creación de nuevos tratamientos que contribuyan a su prevención (si la persona no lo sufre) o su ralentización (si ya han aparecido los síntomas).

En los últimos años ha adquirido especial relevancia la aplicación de terapias no farmacológicas en el cuidado de los mayores. Y entre ellas, una de las más importantes son los talleres de estimulación cognitiva.

 

 

  1. ¿Qué beneficios tiene la participación en los talleres de estimulación cognitiva?
  • Mejora de la autonomía de la persona mayor en sus actividades diarias.
  • Mayor interacción social con personas que también buscan mantener su mente activa.
  • Mayor motivación en las personas mayores para participar en actividades sociales que les permitan sentirse involucrados y activos dentro de la comunidad.
  • Mejora de la calidad de vida debido al incremento de las capacidades cognitivas.
  • Mantenimiento de los cambios cognitivos que se obtienen tras la participación en talleres de estimulación cognitiva.

La relevancia de estas actividades reside en la necesidad de preservar y/o incrementar las capacidades cognitivas con la finalidad de mantener la mente activa y prevenir la posible aparición de déficits.

Por ello, se debe tener en cuenta que una de las causas que producen este decrecimiento de las competencias cognitivas se debe a la disminución de la participación de las personas mayores en actividades de su vida diaria, valorando la importancia de mantener una vida activa y una rutina diaria que permita el incremento de la sensación de bienestar de la persona mayor.

 

 

  1. ¿Qué consigue la estimulación?

Un taller de estimulación cognitiva tiene como finalidad principal el entrenamiento de las diferentes funciones cognitivas de la persona, por ejemplo:

  1. Orientación: capacidad que permite tomar conciencia de uno mismo y del contexto en el que se encuentra en cada momento.
  2. Atención: capacidad de producir, orientar y mantener el estado de activación adecuado para conseguir un correcto procesamiento de la información.
  3. Funciones ejecutivas: actividades mentales complejas. Son esenciales para la planificación, organización y evaluación, entre otros, del comportamiento para la correcta adaptación al entorno. Entre estas funciones se encuentran el razonamiento, la memoria de trabajo y la toma de decisiones.
  4. Cognición social: el conjunto de procesos de carácter cognitivo y emocional que permite a la persona interpretar, analizar, recordar y emplear la información sobre el entorno social (familia, amigos, conocidos…)
  5. Memoria: capacidad de codificación, almacenamiento y recuperación de información previamente aprendida de manera efectiva. Entre los tipos de memoria se distinguen la episódica, la semántica y la procedimental.
  6. Lenguaje: función que permite el desarrollo de los procesos de simbolización. Entre los procesos que los componen se encuentran la comprensión, la fluidez, la escritura y el vocabulario.
  7. Praxias: las habilitades motoras que han sido adquiridas con anterioridad y que ayudan en la consecución de un plan u objetivo.
  8. Gnosias: la capacidad que tiene el cerebro en el reconocimiento de la información que ha sido aprendida previamente. Entre esta información se encuentran objetos, personas y/o lugares que han sido aprendidos a través de los sentidos.
  9. Habilidades visoespaciales: grupo de funciones cognitivas que permiten el análisis y la comprensión del espacio.

 

 

  1. ¿Qué evidencia científica hay?

Existen estudios, como el realizado por Eckroth-bucher y Siberski (2009), que respaldan la idea de que la estimulación constante de las diferentes funciones cognitivas como la memoria, el lenguaje, la cognición social y la atención entre otras puede ser potencialmente útil para prevenir y ralentizar el deterioro cognitivo que se encuentra asociado al envejecimiento.

En Ahora Centros somos expertos en estimulación cognitiva. Realizamos terapias tanto a nivel preventivo como para personas con deterioro. ¡Contacta con nosotros para más información!

 

¿QUIERES SABER MÁS?

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BIBLIOGRAFÍA

  • Eckroth-Bucher, M., & Siberski, J. (2009). Preserving cognition through an integrated cognitive stimulation and training program. American Journal of Alzheimer’s Disease & Other Dementias®, 24(3), 234-245.
  • Madrigal, L. M. J. (2007). La estimulación cognitiva en personas adultas mayores. Revista cúpula, 4-14.
  • Niederstrasser, N. G., Hogervorst, E., Giannouli, E., & Bandelow, S. (2016). Approaches to cognitive stimulation in the prevention of dementia. J Gerontol Geriatr Res S, 5, 2.
  • Rodríguez, J. G., & Gutiérrez, G. G. (2017). Definición y prevalencia del deterioro cognitivo leve. Revista española de Geriatría y gerontología, 52, 3-6.
  • Rozo, V., Rodríguez, O., Montenegro, Z., & Dorado, C. (2016). Efecto de la implementación de un programa de estimulación cognitiva en una población de adultos mayores institucionalizados en la ciudad de Bogotá. Revista Chilena de Neuropsicología, 11(1), 12-18.
  • Ventura, R. (2004). Deterioro cognitivo en el envejecimiento normal. Revista de psiquiatría y salud mental Hermilio Valdizán, 5(2), 17-25.

Cristina Sánchez y Miguel Ángel Maroto- La fase grave del Alzheimer.

 

Estamos ante el final de la evolución de Alzheimer. Si tienes un familiar en esta situación habrás podido comprobar cómo su deterioro es ya muy marcado. Es un periodo de dependencia continua.

Esperanza de vida: en situaciones de demencia avanzada el enfermo puede vivir unos dos años, pero depende mucho de cada persona y de las complicaciones que puedan surgir en este período. Por ejemplo, el deterioro puede ser más lento si se contralan satisfactoriamente las enfermedades que se dan con más facilidad en este estadio, sobre todo las cardiovasculares y la neumonía, que se convierte en la forma más habitual de muerte para un enfermo de Alzheimer.

 

LA MOVILIDAD

En este momento se ven ya seriamente afectadas las zonas cerebrales que se encargan de la actividad motora por lo que, cada vez más, se dificulta la estabilidad propiciando las caídas y los trastornos de deglución (disfagia).

Si se produce una caída con rotura de algún miembro se puede iniciar el síndrome de inmovilidad (en enfermo no quiere levantarse de la cama) que traerá consigo complicaciones como rigidez o adopción progresiva de postura fetal (por el predominio de la musculatura flexora que conlleva esa posición).

Este proceso recuerda, a la inversa, al desarrollo del niño cuando nace, y en él se “recuperan” movimientos reflejos ya perdidos como la succión y la prensión.

 

EL HABLA

Se va deteriorando cada vez más profundamente la capacidad de hablar del paciente. Se entiende muy difícilmente lo que nos dice.

Además, pierde paulatinamente la capacidad para entender a los demás, incluso los mensajes más sencillos. Deja de conocer, poco a poco, a las personas más cercanas y a tener la referencia de sí mismo.

 

¿QUÉ GRADOS DE ALZHEIMER GRAVE EXISTEN?

Nos encontramos estas 6 fases progresivas, según la escala FAST:

  1. Habla limitada a unas poquísimas palabras.
  2. Habla inteligible limitada a una sola palabra.
  3. Pérdida de la capacidad de andar.
  4. Pérdida de la capacidad de mantenerse sentado.
  5. Pérdida de la capacidad de sonreír.
  6. Pérdida de la capacidad para sostener la cabeza.

En la parte final del proceso si el enfermo realizó Testamento Vital, habrá que estar a las disposiciones que hiciera en dicho documento.

 

POR ÚLTIMO, ¿QUÉ PUEDO HACER PARA MEJORAR SU FINAL?

El fin de la vida del paciente está próximo. Podemos tener en cuenta varias recomendaciones para mejorar su calidad de vida en esta última fase:

  1. El objetivo prioritario será el confort del enfermo.
  2. Es importante la compañía de las personas más cercanas pero evitar las visitas sociales.
  3. Retirar las medicaciones que no aporten beneficio sintomático.
  4. Si es necesaria la hospitalización, no admitir terapias orientadas a prolongar la vida con respiración asistida o alimentación enteral (mediante sonda).
  5. Los antibióticos no deben ser usados de forma repetida en estas circunstancias.
  6. Utilizar oxigenoterapia y morfina para combatir la agitación que se produzca.
  7. Ayudar a la familia más cercana en este trance, tranquilizando cualquier duda que tenga.

 

 

¿QUIERES SABER MÁS?

La fase moderada del Alzheimer.

 

BIBLIOGRAFÍA

  • Fundación Pascual Maragall.
  • Consejo General del Colegi de Médicos.
  • Deus Yela, J; Deví Bastida, J.; Sáinz Pelayo, M. P. (2018). Neurología de la enfermedad de Alzheimer. Madrid: Editorial Síntesis.
  • Herández-Lahoz, C., López-Pousa, S. (2016). Alzheimer. Guía práctica para conocer, comprender y convivir con la enfermedad. Oviedo: Ediciones Nobel.